LA DÉCIMO SEGUNDA PALABRA
LA PALABRA DÉCIMO SEGUNDA
En el nombre de Allah, el Misericordioso, el Compasivo
{Y a quien se le da la sabiduría, se le ha dado mucho bien.} (Sura de la Vaca, 269)
Una comparación general entre la sabiduría sagrada del Sabio Corán y entre la sabiduría de la filosofía y un breve resumen de la lección de la educación que enseña la sabiduría del Corán y la sabiduría de la filosofía para la vida personal del ser humano y su vida social y una indicación del sentido de la preeminencia del Corán sobre las demás palabras divinas y sobre todos los tipos de palabra. Así pues en esta Palabra hay cuatro fundamentos:
El primer fundamento:
Mira la diferencia entre la sabiduría coránica y la sabiduría de las ciencias, con el prismático de la siguiente historia a modo de parábola:
En un tiempo hubo un gobernante famoso, religioso y muy hacendoso que quería escribir el Sabio Corán con una caligrafía apropiada a su santidad en sus significados y al carácter inimitable de sus palabras y vestir ese talle prodigioso con un vestido extraordinario, Entonces aquel gobernante grabador escribió el Corán de una manera muy sorprendente y empleó en su escritura todas las piedras preciosas valiosas y para indicar la variedad de sus verdades escribió algunas de sus letras con diamante y esmeralda y una parte de ellas con perla y ágata, y una parte de ellas con rubí y coral y un tipo de ellas con oro y plata y lo adornó y lo grabó de una manera que todo el que lo miraba se quedaba perplejo, ya supiera leer o no supiera, y lo aprobaba, especialmente que esa belleza formal era a ojos de la gente de la realidad alusiones a la belleza tan deslumbrante que había en sus significados y el adorno espléndido al máximo y por ello se convirtió en una obra maestra muy valiosa.
Luego ese gobernante mostró este Corán de escritura maravillosa y belleza extraordinaria a un filósofo extranjero y a un erudito musulmán y les mandó que cada uno escribiera algo acerca de la sabiduría de este Corán en relación con su experiencia para premiarles.El filósofo escribió un libro y el erudito musulmán escribió otro.
El libro del filósofo estudiaba los grabados de las letras y su belleza y las relaciones de unas con otras y la posición de cada una de ellas y las propiedades de sus piedras preciosas, sus cualidades y características sin más. Y nunca abordó en su libro los significados de ese Grandioso Corán, puesto que ignoraba la lengua árabe por completo, e incluso no era consciente de que ese Corán extraordinario es un gran libro cuyas letras poseen significados sublimes y simplemente limitó su mirada a la exquisitez de sus letras y su belleza extraordinaria y a pesar de esto era un ingeniero competente y un fotógrafo artista y un químico hábil y un artesano experto; por esto escribió su libro en concordancia con las habilidades y artes que dominaba.
En cuanto al erudito musulmán, cuando lo miró entendió que era el Libro Claro y el Sabio Corán y no se preocupó por el adorno externo ni se ocupó a sí mismo con las magníficas decoraciones de sus letras y simplemente se dirigió por completo, y ello es lo que se corresponde con la verdad, a lo que es mil veces más elevado, más valioso, más sutil, más noble, más beneficioso y más completo que aquello en lo que se ocupó el filósofo extranjero, e investigó las verdades elevadas y sublimes y los secretos luminosos magníficos que había debajo de esas inscripciones hermosas y escribió su libro como una explicación valiosa de este Sabio Corán y lo hizo bien y con maestría.
Cada uno de ellos presentó su libro al gran gobernante. El gobernante tomó en primer lugar la composición del filósofo y la miró cuidadosamente y vio que ese vanidoso y santificador de la naturaleza no había escrito nunca una sabiduría verdadera a pesar de que había dado cuanto estaba en su capacidad, ya no que no entendió los significados de ese libro, sino que quizás se desvió y se confundió y manifestó la ausencia de respeto y veneración por ese Corán puesto que no prestó atención a sus elevados significados y pensó que simplemente eran inscripciones hermosas y letras magníficas y no valoró el verdadero Corán y lo despreció en cuanto al significado. Por esto el gobernante sabio devolvió la composición de ese filósofo y le golpeó en la cara y lo expulsó de su lugar de recepción.
Luego tomó la composición del erudito musulmán preciso y verdadero y vio que era un comentario del Corán muy valioso, profundo y útil y bendijo su trabajo y valoró su esfuerzo y le dio la enhorabuena y le dijo: Esta es la sabiduría verdaderamente y se le da el nombre de erudito y sabio de verdad al que ha escrito esta composición y a no al otro que no es sino un artista artesano que ha exagerado e ido más allá de su límite. Y en base a ello recompensó a ese erudito musulmán y lo hizo con generosidad ordenando que le dieran diez liras de oro por cada una de las letras de su libro.
Así pues, ¡oh hermano!, si has comprendido la dimensión de esta historia a modo de parábola, mira la cara de la verdad pues
ese Corán Hermoso Magnífico es este universo maravilloso y ese gobernante imponente es el Sultán Anterior al tiempo y Eterno, sea glorificado.Y ambos hombres, el primero de ellos, ese extranjero, es el conocimiento de la filosofía y sus sabios y el otro es el Noble Corán y sus discípulos.
En efecto: El Noble Corán que se lee es la mayor explicación y la más elevada y el intérprete más profundo y elevado de este universo maravilloso que es otro Corán Grandioso que ser ve. En efecto, ese Discernimiento Sabio es el que guía a los genios y a los hombres a las aleyas (signos) del universo que ha escrito la pluma del poder divino en las páginas del universo inmenso y ha compuesto sobre las hojas de los tiempos y las edades.Y él es el que mira a las cosas existentes, cada una de las cuales es una letra dotada de sentido, con el significado literal, es decir: la mira desde el punto de vista de que indica al Hacedor Sublime y dice: ¡Qué buena su creación! ¡Cuán hermosa su creación!! ¡Cuán grande su indicación de la belleza del Originador Sublime!Y así descubre ante las miradas la belleza verdadera de los seres del universo.
En cuanto a lo que llaman el conocimiento de la sabiduría que es la filosofía se ahogó en los adornos de las letras existentes y se quedó asombrada ante las relaciones de unas con otras hasta que se extravió de la realidad y mientras que debía dirigir al libro del universo su mirada a las letras, que indicaban a Su escritor, las miró con el significado nominal, es decir: las cosas existentes por sí mismas y empezó a hablar de ellas en base a esta forma y decir:¡Qué hermosa esta! En lugar de decir: ¡Qué hermosa la creación de ésta! Despojando con estas palabras la belleza verdadera de la cosa y con el hecho de atribuir la belleza a la cosa en sí misma desdeñó a todas las cosas existentes hasta hacer que los seres del universo se quejen de ella el día del Levantamiento. En efecto: La filosofía atea no es sino una falacia sin realidad y un menosprecio del universo y un agravio a él.
El segundo fundamento:
Para llegar al alcance de la diferencia entre la educación ética con la que educa el Noble Corán a sus discípulos y las lecciones que imparte la sabiduría de la filosofía consideramos que hemos de poner a sus discípulos en la balanza:
El discípulo puro de la filosofía es Fira’aún, sin embargo Fir’aún es bajo, puesto que adora la cosa más baja por su propio beneficio y toma todo lo que le beneficia como señor suyo. Luego este discípulo negado, insumiso y obstinado, aunque insumiso pobre, que acepta para sí mismo el máximo grado de bajeza con el fin de obtener placer y es obstinado y vil ya que se rebaja y humilla ante personas que son como demonios e incluso le besa los pies. Luego ese discípulo ateo, vanidoso y arrogante, aunque arrogante incapaz al máximo de sentir en sí mismo ya que no encuentra en su corazón en quien apoyarse. Luego ese discípulo utilitario y procurador de su interés no se ve sino a sí mismo; de manera que la meta de su anhelo es recibir los deseos del ego y el estómago y el bajo vientre y es un intrigante maquinador que se mueve por su interés personal dentro de los intereses de la comunidad.
Mientras que el discípulo del Corán sincero es un siervo, aunque un siervo poderoso que no se rebaja ante nada ni siquiera ante la criatura más grande y no se contenta ni con el Paraíso, esa enorme bendición, como meta de su servidumbre a Allah. Luego es un discípulo humilde, suave, fácil, que no se rebaja por su voluntad a otro que no sea su Originador Sublime ni a otra cosa que no sea Su orden y permiso. Luego es pobre y débil, con certeza de su pobreza y su debilidad, pero rico con respecto a toda cosa en virtud de los tesoros inagotables que su Dueño Generoso le ha reservado en la Otra Vida. Y es fuerte porque se apoya en la fuerza absoluta de su Señor, luego no actúa sino es por la faz de Allah, incluso no se mueve sino dentro de aquello que Le complace para obtener las virtudes y difundirlas.
Y así se entiende la educación con al que se educan los dos sabios en la comparación entre los dos discípulos de ambos.
El tercer fundamento
En cuanto a lo que la sabiduría de la filosofía y la sabiduría del Corán aportan a la sociedad humana en cuanto a educación:
La filosofía ve la fuerza como un punto de apoyo en la vida social y se dirige como objetivo al beneficio en toda cosa y adopta la lucha como regla de la vida, y el racismo y el nacionalismo negativo como nexo de unión de las comunidades. En cuanto a sus frutos, son la satisfacción de las demandas de los deseos y las inclinaciones del ego cuyo asunto es reavivar el desafío del ego y provocar el deseo.
Y es sabido que el asunto de la fuerza es lo concerniente a la agresión, y lo concerniente al beneficio es la competencia, puesto que no basta para cubrir las necesidades de todos y cumplir sus demandas. Y lo concerniente a la lucha es la disputa y la contienda y lo que concierne al racismo es la agresión ya que crece engullendo lo demás y se expande a costa de otras razas. Y a partir de aquí te das cuenta de por qué ha sido usurpada la felicidad humana como resultado del resuello que hay detrás de esta sabiduría.
En cuanto a la sabiduría del Noble Corán acepta la verdad como punto de apoyo en la vida social en lugar de la fuerza y hace que la complacencia de Allah, sea glorificado y la obtención de las virtudes, sea la meta en lugar del beneficio. Y adopta la regla de la cooperación como fundamento en la vida en lugar de la regla de la disputa. Y se compromete con el nexo de la religión, el género y la patria para unir las facciones de las comunidades en lugar del racismo y el nacionalismo negativo. Y hace que sus objetivos sean poner límite al propasarse del ego que ordena el mal y empujar al espíritu hacia los asuntos elevados y satisfacer sus sentimientos elevados para conducir al ser humano hacia la perfección y el ejemplo humanos.
Lo que concierne a la verdad es el acuerdo y lo que concierne a la virtud es el apoyarse mutuamente y lo que concierne a la regla de la cooperación es que cada uno socorra al otro y lo que concierne a la religión es la hermandad y la solidaridad y lo que concierne a sujetar al ego, contener su obstinación y soltar el espíritu y animarlo hacia la perfección es la felicidad de ambas moradas (esta vida y la otra).
El fundamento cuarto
Si quieres entender cómo el Corán es superior a las demás palabras divinas y conocer el alcance de su superioridad sobre las demás palabras, mira y medita acerca de estos dos ejemplos:
El primer ejemplo: El sultán tiene dos tipos de conversación y dos modos de hablar:
El primero es la conversación privada por medio de un teléfono privado con uno de sus súbditos perteneciente a la gente común acerca de un asunto particular que se refiere a una necesidad particular suya.
Y el otro es una conversación en nombre del sultanato supremo y con el título del califato mayor y con la preeminencia de la jurisdicción general con el propósito de difundir sus órdenes sultánicas en los horizontes, de manera que es una conversación que mantiene con uno de sus delegados o con uno de sus grandes funcionarios y es una conversación que trata de un asunto trascendente que importa a todos.
El segundo ejemplo: Es un hombre que sostiene un espejo de cara al sol y el espejo recibe, según su capacidad, una luz e iluminación que lleva los siete colores en el sol, de manera que el hombre tiene relación con el sol en relación a ese espejo y puede beneficiarse de él si lo dirige a su habitación oscura o a su plantel particular pequeño techado a pesar der que el hecho de beneficiarse de la luz se restringe en la medida de la receptibilidad del espejo sobre lo que refleja de la luz del sol y no en la medida de la grandeza del sol.
Mientras que el otro hombre deja el espejo y da la cara al sol directamente y contempla su majestad y percibe su grandeza, luego sube a una montaña muy elevada y contempla el resplandor de su sultán inmenso imponente y se pone frente a él personalmente sin velo, luego vuelve y abre de su pequeña casa y de su plantel techado privado ventanas amplias hacia el sol, encontrando caminos hacia el sol que está en lo más alto del cielo, luego tiene lugar un diálogo con la iluminación perenne del sol verdadero de manera que habla en confidencia con el sol con la lengua de su estado y dialoga con este diálogo coronado con el agradecimiento y el reconocimiento, y dice: ¡Oh sol! ¡Tú que estás sentado sobre el trono de la belleza del mundo! ¿Oh sutileza del cielo y su flor!¡Oh tú que has conferido a la Tierra esplendor y luz y has concedido a las flores sonrisa y alegría y has concedido el calor y la luz juntos a mi casa y mi pequeño plantel al igual que le has otorgado al mundo el más completo calor y luz. Mientras que el dueño del espejo precedente no puede hablar en confidencia con el sol y dialogar con él con este estilo ya que los efectos de la luz del sol están limitados por la limitación del espejo y sus restricciones y están restringidos según la receptividad de ese espejo y su asimilación de la luz.
Así pues, mira a través del prismático de estos dos ejemplos, el Noble Corán para que contemples su carácter prodigioso y captes su pureza y elevación.
En efecto, el Noble Corán dice: {Si los árboles que hay en la Tierra fueran plumas y el mar fuera reforzado por siete mares, no se agotarían las palabras de Allah, es cierto que Allah es Insuperable, Sabio.} (Sura de Luqmán, 27).Y así si se le concede al Noble Corán la posición más elevada entre todas las palabras, esas palabras que no están limitadas por ningún límite, es porque
el Corán procede del nombre supremo y del grado mayor de cada uno de los Nombres más hermosos, y es la palabra de Allah considerando que es el Señor de los mundos y es Su orden considerando que es el Dios de todas las cosas existentes y es Su discurso considerando que es el Creador de los cielos y la Tierra y es una conversación elevada en el sentido del Señorío absoluto y es Su discurso anterior al tiempo en nombre del gran sultanato divino y es el registro de la atención y el honrar del Misericordioso que surge de Su misericordia que todo lo abarca. Y es el conjunto de las epístolas divinas que aclaran la grandeza de la divinidad, ya que en los comienzos de algunas de ellas hay símbolos y códigos; y es el libro purísimo que disemina la sabiduría, descendido del océano del Nombre supremo mira a lo que abarca el trono inmenso
y a causa de estos secretos se aplica al Noble Corán, siendo propio y digno de él, el nombre de “la palabra de Allah”.
En cuanto al resto de las palabras divinas, una parte de ellas son palabras surgidas con una consideración especial y con un título particular y con una manifestación particular de un nombre especial y con un señorío especial y un sultán especial y una misericordia especial y los grados de estas palabras son distintos y diferenciados en virtud de lo especial y lo universal; de manera que la mayor parte de las inspiraciones son de este tipo solo que sus grados son muy diversos.
Así pues, por ejemplo: La más simples y la más parcial es la inspiración de los animales, luego la inspiración del común de la gente, luego la inspiración de los amigos de Allah y luego la inspiración de los grandes ángeles.Y a partir de este secreto vemos que un amigo de Allah dice:
حَدَّثَنِي قَلْبِي عَنْ رَبِّي “Me ha relatado mi corazón procedente de mi Señor”, es decir por medio del receptor de su corazón y sin la mediación de ningún ángel. Y no dice: “Me ha relatado del Señor de los mundos”. O vemos que dice: “Mi corazón es un trono y un espejo que refleja las manifestaciones de mi Señor”. Ni dice: “El trono del Señor de los mundos”. Porque él puede que alcance una parte del discurso divino en consonancia con sus disposiciones y en virtud del grado de su receptibilidad y en relación al levantamiento de cerca de setenta mil velos.
En efecto: En la medida de la elevación de la palabra del Sultán que emana en virtud del sultanato mayor y de su preeminencia sobre su conversación particular con alguno de sus súbditos de entre la gente común; y en la medida de la superioridad del beneficio de la emanación de la manifestación de la luz del sol que está en el cielo sobre el beneficio de su emanación desde el espejo, es posible entender la elevación del Noble Corán sobre todas las palabras divinas y los libros celestiales.
De manera que los libros sagrados y las páginas celestiales vienen en el segundo grado después del Noble Corán en el grado de elevación y eminencia, cada uno tiene su grado y su excelencia, cada uno tiene su parte de ese secreto de la excelencia,
y si se juntaran todas las buenas y hermosas palabras del ser humano y los genios, que no han sido extraídas del Noble Corán, no es posible que fueran semejantes nunca al Noble Corán ni es posible que se acercaran a ser como él.
Y si quieres entender algo de que el Noble Corán descendió desde el Nombre Supremo y desde el nivel supremo de cada uno de los Nombres más hermosos, medita sobre la aleya del Escabel (al-Kursi):
{Y junto a Él están las llaves del No-visto} (Sura de los Rebaños, 59)
{Di: ¡Oh Allah, Dueño del dominio} (Sura de la Familia de ‘Imrán, 26)
{La noche cubre al día que la busca rápidamente y el sol, la luna y las estrellas están sometidos a Su mandato} (Sura de las Alturas de Reconocimiento, 54)
Y se dijo: ¡Oh tierra absorbe tu agua y oh cielo detente!} Sura de Hud, 44)
{Lo glorifican los siete cielos y la Tierra y quienes hay en ellos} (Sura del Viaje Nocturno, 44)
{Vuestra creación y vuestra resurrección no es sino como la de una sola alma} (Sura de Luqmán, 28)
{En verdad ofrecimos la amana (la responsabilidad que implica el iman, la fe) a los cielos, la Tierra y las montañas, pero no quisieron asumirla estremecidos por ello. Sin embargo el ser humano la asumió, realmente él es injusto consigo mismo e ignorante. } (Sura de los Coligados, 72)
{El día en que enrollemos el cielo como un pergamino} (Sura de los Profetas, 104)
{Y no han apreciado a Allah en Su verdadera magnitud cuando la Tierra entera estará en Su puño el día del Levantamiento} (Sura de los Grupos, 67)
{Si hubiéramos hecho descender este Corán sobre una montaña, la habrías visto humillada y partida en dos por temor de Allah. Éstos son los ejemplos con los que llamamos la atención a los hombres para que puedan reflexionar}(Sura de la Concentración, 21)
Y aleyas sublimes semejantes. Luego afina la mirada en las suras que empiezan con
اَلْحَمْدُ لِلّٰ “La alabanza a Allah” y سَبَّحَ ve يُسَبِّحُ “glorifica…” para que veas los rayos de este secreto inmenso, luego mira a las suras que empiezan con الم “Ali, lam, mim”, الر “Alif, lam, ra” y حم “Ḥa, mim” para que entiendas la importancia del Corán para el Señor de los mundos.
Y si entiendes el secreto sutil de este fundamento cuarto podrás entender: El secreto que hay en que la mayor parte de la revelación descendida a los Profetas no es sino a través de un ángel, en cuanto a la inspiración es sin intermediario Y podrás entender el secreto que hay en que el mayor de los amigos de Allah no alcanza a ninguno de los Profetas sea cual fuera. Y podrás entender el secreto oculto en la grandeza del Corán y su preeminencia purísima y la elevación de su carácter prodigioso. Y podrás entender el secreto de la necesidad de la ascensión (del Profeta, al que Allah le dé Su gracia y paz) y la sabiduría de su necesidad, es decir: Entenderás el secreto de que hay en su viaje, que Allah le dé Su gracia y paz, a los elevados cielos y al Loto del Límite hasta estar a la distancia de dos arcos o aún más cerca y a partir de ahí su confidencia con Él, sea glorificado, a pesar de que Él, sea honrado y enaltecido:
اَقْرَبُ اِلَيْهِ مِنْ حَبْلِ الْوَرِيدِ
{Y Nosotros estamos más cerca de él que la vena yugular}, luego su vuelta en un parpadeo a su lugar.
Evet, şakk-ı kamer, nasıl ki bir mu’cize-i risaletidir; nübüvvetini cin ve inse gösterdi. Öyle de mi’rac dahi bir mu’cize-i ubudiyetidir; habibiyetini, ervah ve melâikeye gösterdi.
اَللّٰهُمَّ صَلِّ وَسَلِّمْ عَلَيْهِ وَعَلٰى آلِهِ كَمَا يَلِيقُ بِرَحْمَتِكَ وَبِحُرْمَتِهِ آمِينَ