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Onuncu Söz/es: Revizyonlar arasındaki fark

"“¡Oh Sultán nuestro que nos colmas con Tus bendiciones! ¡Muéstranos los orígenes de los modelos y las fuentes de las sombras que nos has mostrado! ¡Llévanos a la sede de Tu sultanato y no nos dejes perecer en estos desiertos! ¡Y acéptanos en Tu presencia y ten misericordia de nosotros y aliméntanos allí con las deliciosas bendiciones que nos has hecho probar aquí! ¡Y nos atormentes con la desaparición y el destierro! ¡Y no abandones, dej..." içeriğiyle yeni sayfa oluşturdu
("Y esa existencia permanente exige también la permanencia de la existencia de aquellos que la observan y la admiran entusiasmados, porque la belleza eterna no puede nunca estar satisfecha con un admirador efímero; además, un espectador destinado a desaparecer sin vuelta atrás, su amor se convertirá en odio y su admiración y respeto tenderán al desprecio cuando imagine la desaparición. Pues el ser humano es enemigo de lo que ignora y no alcanza. Y..." içeriğiyle yeni sayfa oluşturdu)
("“¡Oh Sultán nuestro que nos colmas con Tus bendiciones! ¡Muéstranos los orígenes de los modelos y las fuentes de las sombras que nos has mostrado! ¡Llévanos a la sede de Tu sultanato y no nos dejes perecer en estos desiertos! ¡Y acéptanos en Tu presencia y ten misericordia de nosotros y aliméntanos allí con las deliciosas bendiciones que nos has hecho probar aquí! ¡Y nos atormentes con la desaparición y el destierro! ¡Y no abandones, dej..." içeriğiyle yeni sayfa oluşturdu)
84. satır: 84. satır:
Ven y vayamos, pues hay una gran reunión en esta isla y todos los nobles del reino se han reunido allí. Y mira, uno de los más nobles generales, que lleva una gran condecoración, está leyendo un discurso, y pide algunas cosas de ese Sultán suyo Compasivo. Y toda la gente dice: “Sí, sí, nosotros también lo pedimos” y confirman a ese señor y lo asisten. Y ahora presta atención pues el amado de este Sultán dice:
Ven y vayamos, pues hay una gran reunión en esta isla y todos los nobles del reino se han reunido allí. Y mira, uno de los más nobles generales, que lleva una gran condecoración, está leyendo un discurso, y pide algunas cosas de ese Sultán suyo Compasivo. Y toda la gente dice: “Sí, sí, nosotros también lo pedimos” y confirman a ese señor y lo asisten. Y ahora presta atención pues el amado de este Sultán dice:


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“¡Oh Sultán nuestro que nos colmas con Tus bendiciones! ¡Muéstranos los orígenes de los modelos y las fuentes de las sombras que nos has mostrado! ¡Llévanos a la sede de Tu sultanato y no nos dejes perecer en estos desiertos! ¡Y acéptanos en Tu presencia y ten misericordia de nosotros y aliméntanos allí con las deliciosas bendiciones que nos has hecho probar aquí! ¡Y nos atormentes con la desaparición y el destierro! ¡Y no abandones, dejándoles errantes, a Tus súbditos obedientes, que te anhelan y Te agradecen, y no los aniquiles!
“Ey bizi nimetleriyle perverde eden sultanımız! Bize gösterdiğin numunelerin ve gölgelerin asıllarını, menbalarını göster. Ve bizi makarr-ı saltanatına celbet. Bizi bu çöllerde mahvettirme. Bizi huzuruna al. Bize merhamet et. Burada bize tattırdığın leziz nimetlerini orada yedir. Bizi zeval ve teb’id ile tazip etme. Sana müştak ve müteşekkir şu mutî raiyetini başıboş bırakıp idam etme.diyor ve pek çok yalvarıyor. Sen de işitiyorsun.
Habla así y suplica mucho mientras tú escuchas y ¡cuán sorprendente es!
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